“Doy clase, hago recreos, corrijo cuadernos, me coordino, atiendo a padres, programo en casa, me formo en mi tiempo libre,…,¡pero tengo muchas vacaciones‼️‼️‼️”
Imaginamos que ya sabéis quien es, SIIIIIIIII, no es otra que la mismísima MAESTRA DE PUEBLO ??????
Pisa fuerte en las redes sociales, y en el último año ha crecido como la espuma. En el ???la adoran por saber trasmitir situaciones cotidianas de los centros educativos.
No os hacemos esperar más:aquí tenéis a maestra de pueblo???
¿Cómo nació maestra de pueblo?
Nace por casualidad, sin pensarlo mucho, más bien como desahogo al día a día de clase y de momento me sirve de terapia: me ayuda a liberar estrés, y a dar mi punto de vista de lo que rodea a nuestra profesión. Si a parte de eso, mis tontunas ayudan o hacen reflexionar también a otros maestros ya sería la repera.
Has bailado con estándares, mirado al microscopio los presupuestos de educación, conseguido un “pacto educativo” en twitter, hasta has confeccionado un bingo para hacer los claustros más amenos,…, ¿pero quien hay detrás de maestra de pueblo? ¿Tus compañeros saben que eres maestra de pueblo?
¿He hecho yo tantas tonterías? ¡Menos mal que mi madre no tiene twitter!
Pues la verdad es que hay una maestra cualquiera, de las que se quejan de las ratios, se muere de sueño los viernes y se pasa las tardes programando. ¿Que si saben algo mis compañeros? No, no, qué vergüenza.
Tus memes y tweets tienen un gran éxito; ¿en qué te inspiras?
Me inspiro en mi día a día, las relaciones con mis compañeros y mis alumnos… También hay mucho maestro en mi grupo de amigos y ya sabes que cuando nos juntamos no sabemos hablar de otra cosa.
¿Crees que la educación necesita un cambio de metodología y con ello un cambio en la manera de evaluar?
Yo creo que en educación necesitamos hacer una reflexión y cambiar todo lo que no funciona, ya sea metodología, evaluación, formación… Todos los que nos dedicamos a la enseñanza y llevamos ya unos años tenemos claro qué cosas nos funcionan y cuales no, qué actividades son las más motivadoras para las alumnos y con cuáles aprenden mejor… Pero aún sabiendo qué tenemos que cambiar la mayoría de las veces nos cuesta mucho dar ese paso, hay mucho miedo. Tenemos que atrevernos a cambiar por el bien de nuestros alumnos.
Qué dirías a los alumnos de magisterio que acaban el grado y se preguntan; ¿y ahora qué?
Si estudias Magisterio tienes que ser consciente de que es una carrera de fondo. Acabar el grado es sólo un punto y aparte, la formación no termina ahí. Si optas por opositar queda un largo camino de estudios y preparación pero cuando apruebas y si sacas la plaza (¡¡sí, eso es posible!!) y quieres ser un buen docente tienes que estar actualizada y seguir formándote. Los docentes debemos ser conscientes de que empezamos yendo al cole desde pequeños pero que no vamos a salir de aquí nunca.
¿Qué opinas de la actual ley de educación?, ¿Para cuando otra?
No puede ser que tengamos una ley educativa cada vez que cambia el gobierno y menos si son leyes aprobadas a espaldas de sus actores principales como son los docentes o que restan las funciones al Consejo Escolar que era la única forma de participación de la comunidad educativa.
Después habría que plantearse si verdaderamente una ley educativa arregla todos los problemas que tiene el sistema educativo, por ejemplo ¿Afectan los cambios legislativos en las metodologías que usan los docentes?
Habría que apostar por una ley de consenso entre los partidos y que contase con la opinión de todos los agentes implicados, una ley duradera para que sus cambios se notasen en el tiempo pero también es necesario una reflexión profunda por parte del profesorado con respecto a metodología y formas de trabajar.
¿Crees que los padres comprenden a los maestros?
Parece que las familias son el enemigo del docente por antonomasia y es una cosa que me da un poco de pena. Hay muchas familias preocupadas por la educación de sus hijos que también están al día de los cambios que se producen en la educación y que quieren lo mejor para ellos.
Nuestro reto es integrarles y hacerles partícipes de la enseñanza de sus hijos. Si las familias saben lo que se hace en el aula, pueden colaborar y se sienten parte del proceso seguro que todo funciona mejor.
Las oposiciones,…, ¿cambiarias algo del actual acceso?
Tenemos un sistema de oposición bastante subjetivo en el que prima todo lo que queremos evitar en nuestros alumnos: La memorización y el factor suerte.
Cambiar el modelo de oposición es muy complicado pero yo apostaría por uno en el que se pueda demostrar en un aula la verdadera capacidad de un docente para saber llevar una clase, atender a las necesidades de los alumnos, dominar los elementos del currículum (no solamente de memoria)…
Nuestros alumnos pupitreros me piden que les des unos consejos para afrontar las oposiciones.
Soy muy mala dando consejos pero yo les diría que sean originales en su programación, que practiquen mucho la exposición oral, que lleven bien preparados los temas pero sobre todo que sean constantes y que no desesperen en los bajones (que los tendrán) porque todo el esfuerzo merece la pena.
Y por último, acaba de salir a la venta tu primer libro: “maestra de pueblo con L de novata” ¿por qué L de novata?
Porque todos hemos tenido una “primera vez” y la recordamos con mucho cariño y quería reflejar en tono de humor esas primeras situaciones por la que todos hemos pasado: la primera vez que te enfrentas a una clase, la relación con tus compañeros, los nervios, las ganas de cambiar…
Creo que nunca debemos perder esas ganas de comernos el mundo que teníamos la primera vez que entramos en un aula.
Ha sido un placer maestra de pueblo, sigue haciéndonos reír como tú solo haces y muchas gracias por colaborar con el pupitre???