Me repetían una y otra vez:
Te vas a cansar antes de llegar…
No lo vas a lograr…
Te van a hacer daño al ver que no puedes…
Si no lo consigues se reirán de ti…
No hacían más que repetirme que sería imposible, y lo logré, sí, LO LOGRÉ.
Me repetían que sólo saltase una vez y conseguí el triple mortal.